La crisis energética por la que actualmente está atravesando gran parte del mundo, ha impactado en varios sectores de la economía que dependen de estos recursos. Sin embargo, el mercado de las materias primas se ha visto impulsado por esta situación de escasez, pues la alta demanda de distintos materiales como el aluminio, el carbón, el cobre, entre otros, ha ocasionado que el precio de materias primas se encuentre al alza.
Por un lado, el aluminio alcanzó el día de ayer su pico récord no visto desde hace más de 10 años, y se ubicó en los 3.049,50 dólares la tonelada en la Bolsa de Metales de Londres (LME). La crisis energética ha impulsado exponencialmente este metal que se utiliza como suministro para muchos objetos, desde latas hasta baterías para iPhone.
Con respecto al cobre, este alcanzó su nivel más alto desde medido de septiembre, y los futuros del cobre para diciembre cotizaron en los 9.481,25 dólares la tonelada en la LME. El Zinc y el plomo también redujeron sus pérdidas iniciales a medida que el petróleo y otros productos básicos, como el mineral de hierro, continuaban subiendo.
El carbón, otro de los materiales más solicitados y demandados por su funcionalidad, ha incrementado su valor y el precio de sus contratos de futuros en la Bolsa de Zhengzhou. El contrato de futuros de carbón térmico en la Bolsa de futuros de recursos de Zhengzhou alcanzó su récord histórico al situarse en los 1.408 yuanes por tonelada métrica (218 dólares o 189 euros) es decir, un 11,58% de aumento.
Esto se traduce en un alza doble de más del 114% con respecto a los precios de principios de año, y este comportamiento se da raíz de las graves inundaciones en una de las regiones más importantes en la producción de suministro de energía en China.
Otra de las materias primas que se han valorizado considerablemente en las últimas semanas es el petróleo, el cual ha presentado un alza en sus dos variantes más vendidas en el mercado, tanto el barril WTI como el Brent registraron un alza mayor del 2% en su precio.
Finalmente, metales preciosos como el oro y la plata registraron una leve caída del 0,15% y el 0,13% respectivamente. El oro cotizó en los 1,754.57 dólares la onza y la plata en los 22,58 dólares la onza.
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